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    Polémica por Tesis de Sailor Moon Financiada con Recursos Públicos del Conahcyt

    Una tesis de maestría titulada «Sailor Moon me hizo gay. La subjetividad e identidad de un hombre gay millennial mexicano desde el consumo de Sailor Moon» ha generado un intenso debate en redes sociales y medios de comunicación en México. La controversia no solo radica en la temática del anime japonés, sino también en el hecho de que la investigación fue financiada con recursos públicos otorgados por el Consejo Nacional de Humanidades, Ciencias y Tecnologías (Conahcyt).

    El autor de la tesis, Daniel Eugenio Salinas Lara, un estudiante del Instituto Tecnológico y de Estudios Superiores de Monterrey (Tec de Monterrey), ha sido objeto de críticas y burlas, especialmente por la premisa central de su trabajo, que explora cómo el anime Sailor Moon influenció la identidad sexual de un grupo de hombres gays millennials mexicanos. La investigación se basa en un análisis cualitativo derivado de 10 entrevistas a fans del anime menores de 35 años.

    El financiamiento de esta tesis con fondos públicos ha desatado una ola de memes y comentarios en redes sociales, con muchos usuarios cuestionando la pertinencia y el valor de destinar recursos del Conahcyt a investigaciones de este tipo. Entre los principales puntos de controversia están la percepción de que el estudio es demasiado limitado en su muestra y que no justifica la inversión pública.

    Sin embargo, otros usuarios y académicos han defendido el trabajo, argumentando que se trata de un estudio cultural y cualitativo que aborda temas de identidad y subjetividad, los cuales son relevantes en el ámbito de las ciencias sociales. Estos defensores subrayan que el objetivo de la tesis no es simplemente analizar un anime, sino explorar cómo los medios de comunicación influyen en la formación de la identidad sexual, un tema que consideran válido para la investigación académica.

    El hecho de que más de 50 mil pesos de fondos públicos fueran utilizados para financiar esta tesis ha avivado la discusión sobre los criterios de selección y la transparencia en la asignación de recursos por parte del Conahcyt. Algunos críticos sostienen que el dinero debería destinarse a investigaciones con un impacto más claro en el desarrollo científico y tecnológico del país. Otros, sin embargo, argumentan que el campo de los estudios culturales también merece apoyo financiero, ya que contribuye a una comprensión más amplia de la sociedad.

    La polémica en torno a esta tesis de Sailor Moon ha puesto en primer plano la importancia de debatir sobre el uso de recursos públicos en la educación y la investigación. También ha resaltado la necesidad de un diálogo más profundo sobre el valor de los estudios culturales y cualitativos en la academia mexicana.

    Mientras el debate continúa, la tesis de Daniel Eugenio Salinas Lara se ha convertido en un ejemplo polarizador de cómo las investigaciones académicas pueden generar tanto interés como controversia, y cómo el financiamiento público en la educación superior sigue siendo un tema de gran relevancia y debate en la sociedad mexicana.

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