Pensilvania, Estados Unidos. – El expresidente de Estados Unidos, Donald Trump, sufrió un intento de asesinato durante un mitin político el pasado sábado. El ataque, que resultó en la muerte de un asistente y varios heridos, incluido el expresidente, ha desatado una intensa investigación.
Trump, que fue alcanzado por una bala en la oreja derecha, se pronunció a través de sus redes sociales diciendo: «Solo Dios impidió lo impensable». El atentado ocurrió mientras presentaba un gráfico sobre los cruces fronterizos a sus partidarios cuando sonaron los disparos. Tras el incidente, Trump fue escoltado fuera del escenario con la oreja y la cara ensangrentadas.
«Me dispararon con una bala que atravesó la parte superior de mi oreja derecha. Supe inmediatamente que algo andaba mal porque escuché un zumbido, disparos e inmediatamente sentí la bala atravesando la piel. Sangré mucho y me di cuenta de lo que estaba pasando», relató el exmandatario.
🚨DEVELOPNG: Donald Trump just survived an assassination atempt.
— Donald J. Trump 🇺🇸 News (@DonaldTNews) July 13, 2024
PRAY! pic.twitter.com/5ZUDUrfinV
El atacante, identificado como Thomas Matthew Crooks, un hombre blanco de unos 20 años originario de Bethel Park, Pensilvania, disparó varias veces desde un tejado cercano al escenario. Agentes del Servicio Secreto lograron abatir al francotirador tras varios disparos. Crooks, vestido con ropa gris de camuflaje, no llevaba ningún documento que facilitara su identificación inmediata, complicando así las primeras etapas de la investigación.
El fusil tipo AR-15 utilizado en el atentado fue adquirido legalmente por el padre del atacante, según fuentes de investigación. Además, en el vehículo de Crooks se encontraron dos dispositivos explosivos, así como en su domicilio en Bethel Park.
El ataque dejó a tres personas heridas de gravedad, incluyendo a Trump. La investigación está siendo dirigida por el Servicio Secreto, con la colaboración del Departamento de Justicia, el FBI y la Oficina de Alcohol, Tabaco, Armas de Fuego y Explosivos.
El portavoz del Servicio Secreto, Anthony Guglielmi, negó las afirmaciones de que Trump hubiera solicitado seguridad adicional para el mitin. «Hay afirmaciones falsas de que un miembro del expresidente solicitó recursos de seguridad adicional y que fueron denegadas. Eso es absolutamente falso. De hecho, añadimos recursos de protección y tecnología y capacidades ante el aumento del tempo de los viajes de campaña», afirmó Guglielmi.
La comunidad política, incluyendo tanto a republicanos como a demócratas, condenó el ataque como un acto de violencia política. El presidente Joe Biden declaró: “No hay lugar para este tipo de violencia en Estados Unidos”.
I have been briefed on the shooting at Donald Trump’s rally in Pennsylvania.
— President Biden (@POTUS) July 13, 2024
I’m grateful to hear that he’s safe and doing well. I’m praying for him and his family and for all those who were at the rally, as we await further information.
Jill and I are grateful to the Secret…
La investigación continúa para determinar las motivaciones del atacante y si actuó solo o con cómplices, mientras la nación se recupera del impacto de este violento episodio.